Se piensa que los factores únicos que son parte de la salud de la boca es el cepillado diario, uso del hilo dental, el enjuague bucal e ir al dentista, pero no solo es así, pues existen unos aspectos de mayor profundidad que van a influir en lo que es el comportamiento y en la salud a nivel general.
Hay estudios que nos dicen que los niños de familias que tienen bajos recursos, necesidades especiales y que se han criado en zonas rurales en el planeta puedan sufrir mayores cargas en materia de enfermedad bucal, lo que hará que aumente la disparidad en materia de salud entre las poblaciones que han sido desfavorecidas.
Algo que ayuda a que haya más enfermedades bucodentales lo que incluyen son la falta de flúor en lo que es el agua de la comunidad, la escasez de implementos dentales y el elevado costo de atención, así como el acceso de carácter limitado al seguro dental.
La cultura y las creencias, una influencia en la salud oral
Como nos comentan los profesionales de mesiodens.es, hay una influencia que existe como la cultura o las determinadas creencias creen que están presentes, pero no hay demasiadas informaciones al respecto. Todo esto se solucionaría con una mayor formación en salud dental.
Los cuidados dentales preventivos
Existen bastantes grupos culturales no cuentan con una orientación preventiva fuerte, en especial cuando se habla de salud, siendo algo enraizado en la salud de la boca.
Las personas con frecuencia lo que hacen es buscar la atención cuando hay un problema, sienten dolor y normalmente es demasiado tarde, estando el detalle en que las intervenciones que se hacen de carácter avanzado para salvar un diente que esté casi perdido como tratamiento de canales de tipo radicular, la denominada endodoncia, las corona y demás suelen ser habituales en los países de occidente, representando un privilegio únicamente para personas con recursos económicos en otras culturas.
Prácticas en materia de higiene bucal
Hay culturas donde hay escasa comprensión sobre las patologías en las encías, el cepillado de los dientes puede hacerse automático de tal forma que se eliminen los restos de comida, pero pensemos que eliminar la placa y el sarro es algo que casi no se entiende.
De todo ello podemos pensar que la utilización del hilo dental, el enjuague dental o los limpiadores de lengua son casi desconocidos y pueden ser vistos para el escepticismo.
No debemos olvidar que hay otro extremo, caso de la población norteamericana, en la que buena parte tienen obsesión con tener los dientes blancos y totalmente rectos, lo que ha ido calando.
Utilización de los remedios populares
Hay culturas, donde existe una preferencia por la utilización de los remedios y las curas tradicionales, tanto en la medicina occidental como en su conjunto.
La utilización de hierbas o los métodos como puede ser la acupuntura, donde las molestias en todo el área del cuerpo que incluyen el dolor oral se utilizan los remedios culturalmente aceptando la transmitidos mediante generaciones, caso de algunas familias afroamericanas, que usan bolas de algodón que se empapan en una solución de aspirina, agua salada o alcohol que es un remedio casero que se conoce y es eficaz para luchar contra los dolores o la hinchazón.
Podemos concluir diciendo que es fundamental ser conscientes de que el cuidado a nivel sanitario es una construcción en lo cultural que aparece de las creencias sobre la naturaleza dela enfermedad y del cuerpo humano, lo que agrega a esto las cuestiones de tipo cultural que son importantes para poder focalizarse en la atención de carácter preventivo y su eficacia, todo ello sin hablar de las intervenciones en patologías médicas y odontológicas.
Los vínculos entre los proveedores de atención primaria y de salud bucodental para los niños que tienen una importancia cada vez mayor a la hora de reducir las disparidades generales en materia de salud, pues es importante que se piense en la importancia del aspecto cultural en la salud dental.
Como las caries dentales pueden empezar tan pronto como los dientes pueden comenzar a entrar en erupción, la estrategia en el campo de la salud oral preventiva al que se dirigen los niños cuando se transmiten bacterias orales de madre a niño y los hábitos alimenticios se establecen, lo mejor es que los bebés los vea un odontopediatra los dos primeros años.
Estamos ante una oportunidad ideal para que los profesionales vayan a promover la salud oral y se sientan las bases del cuidado dental para las generaciones en el futuro.