Nuestra casa debe ser una representación de todo lo que somos y de todo lo que queremos. Es algo básico para que las personas la habitamos nos encontremos perfectamente en ella y sintamos esa comodidad que siempre es necesaria para intentar que seamos felices en el sitio en el que vamos a pasar más tiempo a lo largo del día. Si no sentimos esa conexión con nuestro propio domicilio, será difícil que tengamos la posibilidad de ser felices y sentirnos cómodos con nuestra vida. Por tanto, debemos hacer de nuestro hogar una extensión de nosotros mismos. Y hay muchas maneras de hacer que eso sea posible.
Una de esas maneras tiene que ver con la decoración interior y la distribución de los espacios. El domicilio debe estar pintado, tanto por dentro como por fuera, de un color que nos guste y que no sea demasiado complicado para la vista. Y, como no podía ser de otra manera, tenemos que incluir elementos que también nos agraden la vista dentro de casa, ya sean cuadros, floreros, muebles o cualquier otra cosa. Hay más opciones que en ningún otro momento de la Historia y la verdad es que solemos considerar que el que no es feliz en su casa es porque no quiere, porque las cosas de las que estamos hablando tampoco son muy caras ni difíciles de conseguir.
En los párrafos que siguen, vamos a centrarnos en lo que tiene que ver con la pintura, la primera de las cosas a las que hacíamos referencia. Son muchas las personas que han apostado por pintar sus casas porque saben el aire fresco que eso les proporciona. Debemos tener siempre presente que hablamos de un producto que habla a su vez sobre nosotros, que le dice al resto del mundo cómo somos y qué es lo que queremos mostrar acerca de nuestra vida. Estamos convencidos de que muchas de las personas que estáis leyendo estas líneas habréis querido en algún momento que vuestra vivienda, a través de sus colores, responda a vuestras expectativas.
Estamos en un momento en el que es idóneo pintar la vivienda, ya sea por dentro o por fuera. Según lo que apunta una noticia publicada en el diario argentino La Voz, en este país se disparó el número de personas que lo hizo durante la cuarentena que se produjo por culpa de la pandemia. La verdad es que, si lo pensamos detenidamente, este período fue ideal para realizar labores como esta. Muchas personas siguieron estos pasos también en otros países como el nuestro y la verdad es que el resultado de todo ello ha sido espectacular, así como la satisfacción de la gente que ha visto esa transformación en sus casas.
Y no solo se ha ejecutado un proyecto como del que hablamos en el caso de las casas. También se ha ido incrementando el número de negocios que, desde la pandemia hasta ahora mismo, han incorporado una mano de pintura en sus instalaciones físicas. La verdad es que eso ayuda a reforzar la imagen de la marca y que sea mucho más llamativo de cara a los clientes. Ni que decir tiene que ese es un motivo más que de sobra para garantizar un repunte de las ventas, algo que no cabe duda de que es imprescindible para hacer posible que el negocio tenga futuro y también para que obtenga todos los beneficios que se esperan de él.
¿Qué color es el preferido para las personas en su vivienda? La verdad es que son muchas las opciones que se manejan en este sentido y todas y cada una de ellas presentan ventajas. En una noticia publicada en la página web de Blanc Festival se menciona qué tipo de cuestiones y mensajes se refuerzan con cada color en concreto. Aquí están los resultados:
- El rojo es el color de la energía, la pasión o el peligro. Es uno de los colores escogidos por marcas de primera línea de todos los sectores, o sea que permite posicionarnos tanto si pintamos las paredes de nuestro negocio como si hacemos lo propio con las de nuestra casa.
- El naranja, por su parte, hace referencia a la juventud, la creatividad y el entusiasmo. Hablamos de un color especial y de los que más capacidad tienen para llamar la atención. Es verdad que es más raro verlo pintado en las paredes de las casas, pero sí es cierto que cada vez más empresas apuestan por él.
- El amarillo es uno de los colores más alegres de todos cuantos existen. Precisamente por eso es el color de la felicidad, la esperanza y la espontaneidad. A llamativo no le gana nadie, eso lo podéis dar por seguro.
- El verde es el preferido por muchas personas. Es el color de la naturaleza, el crecimiento y la armonía. Precisamente por ser el color del primero de esos valores, el de la naturaleza, es el símbolo de todas aquellas personas a las que les gusta cuidar del medioambiente.
- El último color del que os vamos a hablar es el azul, que es una manera de definir la inteligencia, la tranquilidad y la confianza, valores que son extremadamente útiles en cualquier momento y por los cuales este color se ha convertido en uno de los preferidos a la hora de decorar viviendas y negocios. Además, que sea uno de los colores que puede presentar una mayor cantidad de combinaciones y tonalidades hace que la confianza que la gente tenga en él sea muy grande.
Teniendo en cuenta que la vivienda es una de las grandes propiedades de las personas, nos parece lógico y evidente que todos y todas queramos sacarle el máximo partido haciendo que destaquen y que se conviertan en lugares que hablen de nosotros a la perfección. Pintar es una de las mejores alternativas para ello y una de las que está siendo más utilizadas, según nos cuentan desde Decolor, una entidad especializada en todo lo que tiene que ver con la provisión de pinturas para diferentes superficies. El color preferido para los españoles en los últimos años, por cierto, es el verde claro.
El color del coche también nos importa
No solo de la vivienda vive el ser humano. Para reforzar todo lo que hemos dicho de nuestra imagen, también es interesante que pensemos en qué otras propiedades podemos tener y en el color en el que van a ser producidas. Como no puede ser de otra manera, los vehículos son idóneos para transmitir todos esos valores de los que os estábamos hablando más arriba. El color de los coches, las motocicletas o las furgonetas varía más que el de las viviendas. Por poner un ejemplo, aquí el verde claro no domina tanto como sí que lo hacía en el caso de estas últimas. Todo está mucho más repartido.
Opiniones en este sentido las hay para todos los gustos, como no podía ser de otra manera. Son muchos los coches que existen en el parque de automóviles actual y la verdad es que cualquier calle o carretera por la que circulan es una mezcla preciosa de tonos rojos, azules, verdes, amarillos, negros, blancos… Lo cierto es que detrás de cada uno de ellos hay una pequeña historia y que la elección de cada color responde a un argumento, a una manera de opinar que es perfectamente respetable y que no debe ser objeto de ninguna crítica, faltaría más. Lo importante de verdad es que cada persona se sienta cómoda y esté orgullosa del coche que conduce.
Y, por supuesto, lo mismo ocurre con el resto de propiedades. Cualquier cosa es susceptible de tener el color que deseamos. Un mero cuaderno, una taza o un plato son elementos que pueden tener un color concreto y que también nos va a definir de alguna manera. Es una de las maneras que tenemos también para vender, si somos nosotros los que disponemos de algún negocio. Siempre querremos tener a mano una gama de productos de todos los colores para tener la posibilidad de contentar a todo el mundo. Y es lógico que así sea. Eso es lo que nos puede conducir al éxito más absoluto y de lo que, por tanto, nunca nos tenemos que olvidar.
Estamos convencidos de que son muchas las personas que van a seguir confiando en los colores como el mejor medio para hacer mejores sus viviendas y sus demás propiedades. Es algo inherente al ser humano, un ser humano que necesita llenar su vida de luz y color. A fin de cuentas, este es un elemento que forma parte de la realidad y que nos ayuda a vestirla, a convertirla en algo más agradable de lo que podría ser si esta solo se pudiera ver en blanco y negro. Por eso, siempre debemos confiar en el color. Nunca nos va a decepcionar. Siempre nos va a aportar algo diferente. Son muchas las ocasiones en las que se puede demostrar que ha sido así y que así seguirá siendo.